Excelente concepto en el que fallan los detalles. La idea de hotel con encanto para parejas, acompañado de un magnifico restaurante, es buena, pero en este caso fallan los detalles. En lo positivo el trato personal y cercano de los empleados, su situacion en las afueras, lo que le da tranquilidad, su afamado restaurante, las solo siete habitaciones, la decoracion, el desayuno y facil aparcamiento. En lo negativo el cercanias a menos de cien metros y pasando con regularidad, la carretera que pasa por el pueblo pegada al hotel, las habitaciones abuhardilladas, en la que estuve, en las que te golpeas con el techo con facilidad ya que los armarios estan en la zona de techo bajo, la, y es una opinion personal, mala eleccion de los baños, ya que taza anclada a la pared y no al suelo y ducha estan en un habitaculo de madera mientras el lavabo se halla fuera, las maderas que forman los caminos y enmarcan la piscina necesitan ser renovadas y creo que el jardin deberia tener cesped y no la tierra que lo cubre ahora.