Bormio es un destino vacacional para disfrutar durante todo el año, ubicado en el corazón de los Alpes italianos. Deslízate por las desafiantes pistas de ski en invierno, practica senderismo por las colinas y los valles cubiertos de césped en primavera y verano, y relájate en las aguas termales en cualquier época del año. Este pueblo alpino tiene una larga historia que se extiende a lo largo de varios siglos y cuenta con una variedad de palacios, torres e iglesias antiguos.
Aquí se celebró el Campeonato Mundial de Esquí Alpino en 1985 y 2005, por lo que el resort está equipado con modernas instalaciones de ski y patinaje. Deslízate por más de 50 kilómetros (30 mi) de pistas. Encontrarás pendientes para todos los niveles, incluso para principiantes.
Si no te gusta esquiar, igualmente encontrarás una gran variedad de actividades para disfrutar en el pueblo y los alrededores. Relaja tus cansados músculos en uno de los centros de spa. Los baños termales de Bormio cuentan con agua rica en minerales proveniente de un manantial junto al río Adda. Además de las aguas curativas, encontrarás saunas, baños de vapor y tratamientos de lodo.
Dirígete al centro histórico, donde podrás ver muchos edificios de los siglos XV y XVI. Entra a la Iglesia de San Vitale de estilo románico para contemplar el retablo de madera del siglo XIV. Levanta la mirada y admira la Torre degli Alberti, una torre medieval del siglo XIII.
Dedica algunas horas para recorrer el Palacio De Simoni, donde se encuentra el Museo Cívico. Sus colecciones incluyen obras de arte de los palacios y las iglesias, además de réplicas de los interiores de las casas de diferentes épocas.
Aprovecha para practicar senderismo durante los meses cálidos. Encontrarás más de 600 kilómetros (372 mi) de senderos, caminos y carreteras que atraviesan valles, bosques y montañas. Recorre los bosques, los terrenos inundables y los valles del Parque nacional Stelvio. Camina a orillas de los arroyos de montaña y un lago de montaña a gran altura e intenta avistar especies de vida silvestre, como águilas reales, venados y pájaros carpinteros.
Para llegar a Bormio, vuela a uno de los tres aeropuertos de Milán. Luego, renta un auto para hacer el trayecto de 200 kilómetros (125 mi) en dirección norte. También puedes combinar un viaje en camión y en tren para luego disfrutar de la variedad de actividades alpinas al aire libre.
