Tuve una muy mala experiencia con el staff del hotel y su total falta de empatía y habilidad de cuidar al cliente. El gimnasio no se puede usar antes de las 8 de la mañana por “política” (aunque la información no consta en ninguna lado en el hotel), así que me denegaron mi solicitud de acceder antes ya que tenía que trabajar y me iba del hotel a las 7:30. Una pena, el gimnasio estaba ahí, los empleados también. Pero órdenes son órdenes. Yo solo quería hacer ejercicio antes de empezar mi día de trabajo, es lamentable que la “política” de la empresa denegue al huéspede un servio tan básico que no les cuesta nada.