El muelle de Brighton es el corazón del centro de entretenimiento costero de la ciudad. Come algodón de azúcar y súbete a montañas rusas emocionantes y, luego, quédate hasta el atardecer para dar un paseo.
Visita el moderno parque de diversiones del muelle victoriano que ofrece una mezcla de atracciones llenas de adrenalina para adultos y otras especiales para los niños. Da vueltas en la montaña rusa, prepárate para un descenso mojado en un tronco, maneja un coche chocón y echa un vistazo a la extraña actividad fantasmal en el hotel del terror.
El paseo Booster ofrece una fantástica vista elevada del muelle, ya que sube 39.6metros (130ft) antes de descender a una velocidad de 96.5 kilómetros por hora (60mph). Desde la atracción Helter Skelter, ubicada sobre el muelle, a 0.5kilómetros (0.3mi) de la costa, puedes ver hasta la isla de Wight.
Disfruta de videojuegos y otros juegos en el palacio de la diversión y en el domo, dos grandes salones de juegos.
No te pierdas algunos de los snacks tradicionales de muelle, como donas y hot dogs. Hay más de 30puestos de comida, así como bares y un restaurante donde se vende pescado y papas a la francesa.
Disfruta de una caminata por el muelle y admira los trabajos en hierro decorativo de estilo victoriano. Estos paseos son fascinantes durante las tardes cálidas de verano cerca de la puesta del sol, cuando puedes ver las luces que se encienden e iluminan los alrededores. Desde aquí, puedes ver los restos del antiguo muelle West. La estructura se dañó por acción de tormentas e incendios, y lo único que queda hoy en día es parte de su armazón metálico.
El muelle de Brighton y su parque de diversiones están abiertos todos los días, excepto el día de Navidad. La entrada al muelle es gratuita, aunque deberás pagar para entrar al parque de diversiones. Los boletos se pueden utilizar de forma ilimitada durante todo el día. El muelle se encuentra frente a la estación principal de camiones de Brighton, y la estación de trenes está a poca distancia. Está permitido estacionar en la calle, aunque hay que pagar un cargo.
