Beijing es un reflejo de la propia China, llena de historia, desde los acontecimientos más antiguos hasta los más modernos. Este recorrido comienza en la plaza Tian An Men y en la historia más reciente de China, influenciada por el presidente Mao y el auge del comunismo. Desde allí se dirige a la Ciudad Prohibida, originalmente encargada por el emperador Yong Le en la dinastía Ming. Ha sido la sede del poder durante siglos y ha sido testigo de innumerables batallas y reconstrucciones, y la arquitectura que se ve hoy en día data del siglo XVIII. La Ciudad Prohibida también se conoce como el Museo del Palacio Imperial, con todo el arte y el esplendor al alcance de tus ojos.
Después de una deliciosa comida, se dirige al Templo del Cielo. El Templo del Cielo es el complejo de templos y altares más grande de China, un ejemplo extraordinario de arquitectura religiosa que se remonta a las dinastías Ming y Qing. Tu destino final ha sido la retirada de los emperadores durante 800 años, el Palacio de Verano. Uno de los mejores parques de Pekín rodea el palacio y podrás explorar los jardines, los templos y la galería de arte más larga del mundo. Terminaremos su ajetreado día con pintorescos viajes en autobús y una experiencia de compra inmejorable en el Mercado de las Perlas.