Si reservas en un hotel histórico, podrás pasar unas noches en un edificio reconocido oficialmente por su valor histórico. Un palacio, un castillo, una residencia y hasta una cabaña, un pub o un rascacielos pueden convertirse en hotel histórico, la única condición es que tengan una relevancia específica. La arquitectura tradicional o la decoración de época que suele apreciarse en los espacios comunes o las habitaciones de los hoteles históricos de Bélgorod es lo que les aporta un toque especial.